La Agricultura
Entrada Avinguda Marquès de l'Argentera del Parque de la Ciudadela
Escultor: Venanci Vallmitjana y Barbany, firmada, ejecución: José carcasas
Diseño: Josep Fontseré
Materiales: Piedra caliza
La escultura hace pareja con la representación de La marina y se encuentra decorando uno de los pilares que forman una de las puertas del parque. Ambas esculturas se colocaron en diciembre de 1884 y cada una pesaba 400 quintales. Una renovada solución en este tema es la que inspiró Vallmitjana en trabajar en esta obra. Aquí ya no utiliza una figura mitológica divina para representar la alegoría, sino que ésta se da a conocer por una figura femenina majestuosa captada en un momento de reposo, apoyándose sobre una horca de las que se utilizan para segar y sosteniendo en la mano un racimo de uva.
Así pues, nos encontramos con una obra de género alegórico que deja de lado las figuras basadas en la mitología clásica para ir a buscar una visión más directa de los personajes. Venanci Vallmitjana acerca a la poética del realismo sin olvidar que había que dar a aquellas obras la monumentalidad necesaria que pedía su función. Con esta idea, da importancia al gesto y los vestidos. Una vez más, utilizando los contrapuestos que había usado Miguel Ángel y, como éste, en esta estatua, tal como ocurre en las cuatro que forman el conjunto, se busca dar a las figuras una expresión valiente y de gran fuerza. También coinciden en utilizar la ponderatio clásica, solución que a la vez que posibilita unas líneas dinámicas, le permitía un cuidadoso trabajo de los trajes que se arañando al cuerpo de manera sabia. En la manera de resolver la posición del cuerpo y los vestidos, el escultor tomó como punto de partida los trabajos de Bernini, especialmente los ángeles que se encuentran en el Ponte Sant'Angelo o en San Andrea delle Fratte en Roma. Este aspecto nos demuestra una vez más como saben encontrar ejemplos anteriores donde mirarse, sin que la obra deje de tener la huella de Venanci Vallmitjana. Este también acertó en la forma en que adapta los elementos secundarios en la figura principal, especialmente el niño que se le acerca cargado de espigas y uvas. Estos elementos, junto con los frutos que caen de una cesta tumbado, nos permiten afianzar la idea alegórica que allí se nos presentaba.
Como cosa curiosa, el pedestal donde se encuentra ubicada esta escultura, al igual que el de sus compañeras, parece que fue proyectado por Antoni Gaudí.
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S. Pere, S. Caterina i La Ribera - Parc de La Ciutadella
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